Una pipa extraordinaria que combina las cuatro características que más me atraen de la obra de Ryan: sus fuertes tallas, los detalldísimos y profundos arenados, el delicado e impecable manejo del bamboo, y las espléndidas boquillas.
Fuerte y masculina de rim a botón, está recorrida por detalles de gran sutileza que le aportan equilibrio y elegancia sin nunca desmetir su propósito u origen. El aro del hornillo lustado propone un muy buen contraste con el profundo arenado, mientras que el reducido diámetro de la caña genera un contrapunto muy interesante con la robusta cazalota. La perfecta boquilla, como todas las de Ryan, remata con garbo un conjunto muy atractivo que, además, es una sitter totalmente estable.
 
GB