De nuevo Alex nos sorprende con una pieza que no parece tallada, si no que tiene un fluidez líquida tal que asemeja un derrame de oscuridad concentrada.
Su versión de este shape clásico dista tanto de lo que uno espera ver en una pipa que realmente sorprende y despierta emociones. Es arte.
Hay muchos artesanos. Alex es un verdadero artista y sus piezas producen reacciones viscerales.
Una pieza terriblemente deseable y que no desentonará en la más exigente de las colecciones.
 
JMV